En diseño gráfico, el texto es una masa informe e ilimitada. Al contrario que las imágenes o las páginas, no se presenta en unidades (una imagen, dos páginas, siete dibujos…). Su volumen (lo que ocupa) es indefinible.
¿O no es así? Pues no. En diseño gráfico, contar texto (cuantificarlo en unidades de medida) es posible y necesario.
Para planificar un trabajo y saber cuánto espacio necesitará un texto o, al revés, cuánto texto debemos encargar para un espacio un diseñador gráfico debe aprender a medir los textos: A dividirlos conceptualmente en unidades de cuenta que le faciliten su tratamiento.